La presentación estuvo a cargo de Julio Henríquez, CPO de Enjoy, que expuso el proyecto “Transformación del proceso: Gestionar y operar cajas de juego”, proyecto que ganó la categoría “Mejor proyecto de mejora de un proceso de negocio” en la Premiación del Club CPO del año pasado.Javier Bermúdez, Subgerente de CETIUC, dio la bienvenida a los invitados contando sobre los proyectos del Centro de Estudios de Tecnologías de la Información para este año: la continuación del Diplomado en Gestión de Procesos de Negocio, el BPM Meeting que se realizará el 19 de Abril en el Campus San Joaquín de la Pontificia Universidad Católica de Chile, y el Estudio Nacional BPM. También aprovechó la ocasión para saludar a nuestros partners, SCI, y Aura Portal.
Luego se dio paso a la exposición, que en esta oportunidad estuvo a cargo de Julio Henríquez, Gerente de Procesos de Enjoy, que mostró su proyecto de gestión y operación de cajas de juego en los casinos, así como una radiografía de la Gestión de Procesos en Enjoy y la economía de escala centrada en el juego que mantiene a Enjoy como la empresa líder del rubro en Chile y Latinoamérica.
Julio presentó el área de Gestión de Procesos de Enjoy como un área que busca la consolidación y la gestión estratégica en torno a procesos, y que intenta pasar de un esquema basado en la implementación a uno de gestión permanente de procesos.
El proyecto de las cajas de juego perseguía cuatro objetivos específicos: reducción de tiempos de espera, automatizar las transacciones, disminuir la cantidad de cajeros y simplificar los procesos. Para esto se utilizó una metodología Lean-Six Sigma, aunque como el mismo Julio Henríquez mencionó, no de manera fundamentalista, sino que adaptándola a los objetivos y el contexto. Se cotejaron datos y se realizó una inspección en terreno sobre el trabajo realizado por los cajeros, y se comparó también la manera en que las cajas de juego funcionan, por ejemplo, en Buenos Aires. La implementación del proyecto fue exitosa salvo en Mendoza, donde el factor de la escasez de billetes no fue considerado de manera correcta, por lo que la instalación de máquinas de cambio automáticas trajo problemas. Sin embargo, en términos cuantitativos, se redujeron los tiempos y el riesgo del proceso, con beneficios de 400 millones anuales.
Por último, se hizo hincapié también en que este proyecto fue fruto de un trabajo de años para el área de procesos, y que sin la experiencia adquirida con el tiempo, la implementación exitosa no hubiese sido posible.
Finalmente, en una ronda de preguntas de los asistentes, se debatió enérgicamente sobre la metodología utilizada para el proyecto, la importancia del rol del área de procesos y cómo, sin un impacto financiero significativo para la empresa, es difícil que un proyecto de mejora de procesos sea tomado en cuenta.